Dejé el coche aparcado en el
puerto de Somosierra, a 1440 metros de altura, junto a la gasolinera del puerto,
en dirección de Madrid a Burgos, sale una pista ya, desde su inicio en subida,
a unos cuarenta metros de la salida una puerta enrejada, normalmente siempre
abierta, tras ella, dos pistas, tomo la de la derecha, como referencia, a la
izquierda hay un deposito de agua, poco más adelante, a mi derecha queda un
pequeño pinar y, al terminarse el pinarcillo, una pista a la derecha y otra a
la izquierda, que es la que tomo, de frente un camino poco marcado que puede
ser un atajo, pero al no conocer el camino prefiero seguir por la pista.
Como referencia, a poco más de diez
minutos desde la salida, a mi derecha queda una buena arqueta de hormigón, sigo
por la pista manteniendo sus zig-zags hacia un nuevo pinar, enfrente de mí, parece
que la pista me hará dejar el pinar a mi derecha, pero no es así, en su último
zig-zag me enfrenta al pinar, antes hay una nueva alternativa de otra pista
hacia la izquierda que no tomaré.
Ya enfrente del pinar, la pista se
empina un poco y entro al pinar, a 1615 metros según mi altímetro, llevo
andando unos veinticinco minutos, ya dentro del pinar una nueva alternativa de
la pista, una bifurcación a la derecha, pero tomo la de la izquierda que es la
correcta, esta pista hace unas pocas zetas más, y antes de salir del pinar me
ofrece una nueva pista a la izquierda que no tomo, sigo por la bifurcación
hacia la derecha, ya fuera del pinar, a 1745 metros de altura, la pista gira
hacia la derecha y allí mismo, con uno de los muy pocos hitos que me encontraré
en todo el día, veo una nueva pista, que nace allí mismo y se dirige hacia la
izquierda para bordear y dejar a mi derecha toda la cadena de la sierra Cebollera,
más o menos, llevo unos cincuenta minutos de camino.
Aquí la pista se suaviza, casi
voy llaneando, llego a otra pista que sale hacia mi izquierda y que no debo
tomar, aquí veo un senderito que sale hacia mi derecha, hacia el cordal de la
sierra Cebollera, bien esto es lo que
luego, al bajar, vi que era, quizá lo más correcto, subir hasta la cima de
Cuchar Quemado (2045 metros) y, desde allí, por una pista muy evidente que
luego veré desde la cima, seguir cómodamente hasta el Tres Provincias (Peña
Cebollera Vieja), pero la guía que llevé me indicaba segur adelante por la
pista, bien aún, unos doscientos metros más adelante, poco antes de llegar al
arroyo de las Pedrizas, vuelvo a ver otra desviación a la derecha que me
subiría al Cuchar Quemado, tampoco lo tomé y llegué al arroyo del Chorro, en
una buena curva de la pista hacia la izquierda, ya en la misma base del Tres
Provincias, a donde llego en una hora media pasada.
A partir de aquí por la margen
izquierda del arroyo del Chorro, o sea dejándolo a mi izquierda según subo, hay
ratitos de pequeño sendero, ratitos que hay que ir a trocha, pesado, pero bueno
lo subo hasta llegar a casi el collado entre Cabeza del Tempraniego (2069
metros) y el tres Provincias, aquí, dejando unos bloques de piedra a mi
izquierda, cruzo el nacimiento del arroyo del Chorro y sigo hacia la evidente cima,
dejo a mi izquierda un gran hito, no veo ninguno más, no veo camino alguno y me
guio por la intuición de la cima evidente, no hay pérdida, bueno en último caso
se puede ir hacia la derecha, hacia arriba, hacia la pista del cordal de la
sierra que, al tomarlo y girando hacia nuestra izquierda nos llevará hasta la
cima, en cualquier caso sigo hacia arriba, y pocos metro antes de la misma,
cruzo la pista, llevo cerca de dos horas y media y ya veo el hito cimero, cima
a la que llego en otros cinco minutos pasados, a 2129 metros de altura.
Cerca del vértice geodésico, un
monolito marca la separación entre las tres provincias, Madrid, Segovia y
Guadalajara, buenas vistas hacia la meseta segoviana, hacia la sierra de
Guadarrama o hacia sierra de Ayllón.
La bajada la hago por el mismo
sitio de subida, en menos de dos horas y me sirve para cerciorarme de que
hubiera subido mejor tomando la desviación hacia el cordal de la sierra
Cebollera.
Y, al llegar al puerto, si nos apetece, un pequeño y agradable paseo para ver la Chorrera de Los Litueros, merece la pena.
Y, al llegar al puerto, si nos apetece, un pequeño y agradable paseo para ver la Chorrera de Los Litueros, merece la pena.
Hola Ángel:
ResponderEliminarNos conocimos en Sierra Nevada,14 de mayo. Mi marido y yo nos dirigíamos al Puntal de la Caldera,anduvimos contigo hasta que te desviastes para ascender al Cerro de los Machos.Queremos darte nuestra enhorabuena y mi más profunda admiración por todos los lugares que has conocido y por todas las montañas conquistadas, Eres una auténtica máquina
He intentado localizarte en facebook pero no hay forma de dar contigo. Un saludo Ángel. Es un placer leerte y seguir tus fantásticas aventuras a través de tu blog.
Pilar.