domingo, 31 de mayo de 2009

El Tesorero en Picos


Es el limite entre las provincias de Cantabria, León y Asturias, lo que si es cierto es que una de las más bonitas subidas de Picos, el lugar de confluencia de los principales cordales del Macizo Central y uno de sus mejores y más frecuentados miradores.

Para hacer la subida salimos de Potes a Fuente Dé a 1078 metros, donde dormimos y, por la mañana, tempranito nos fuimos al teleférico, bien, bien, cerrado aún, hay que esperar casi una hora ¿qué hacemos? subimos andando o esperamos, al final, dado que no sabíamos como sería de duro el día decidimos esperar y subir en el teleférico hasta la estación de El Cable a 1850 metros de altura, impresionante, eso sí, quién tenga vértigo que no mire hacia abajo durante la subida. En otra ocasión intentaré la subida andando desde Fuente Dé, he leído que es una hora y tres cuartos partiendo por una senda bien marcada, que ví, junto a la estación del teleférico y que parece ser que tiene fuertes pendientes y algún trepe, pasa por la Vega de Liordes y la Canal Jenduda y debe tener unas muy buenas vistas sobre el Coriscao y los Altos de Valdeón.

En cualquier caso, una vez llegados hasta El Cable nos dirigimos por una pista a la Horcadina de Cobarrobres que en un cuarto de hora nos deja en la bifurcación hacia el refugio de Áliva la cual no tomamos, si por la dirección N.O. a través de las pedreras de los paredones de la vertiente occidental de Peña Olvidada, llegamos a una cerrada curva llamada la Vueltona a 1980 metros, hasta aquí algo más de media hora, y ya divisamos sarrios por primera vez, siempre me ilusiona verlos, desde aquí tomamos una pista más estrecha, pero bien marcada, en dirección Norte dejando a nuestra derecha las pedreras de Peña Vieja y, paso a paso, sin ser excesivamente pendiente, llegaremos en hora y media total a la altura de la aguja Bustamante a 2275 metros de altura.

Y nueva bifurcación de caminos, hacia la derecha se dirige hacia el Collado de la Canalona y el de la izquierda nos llevará en otra media hora hasta Horcados Rojos desde donde se ve el sorprendente refugio vivac de Cabaña Verónica que a 2325 metros con capacidad para seis o siete personas, que no tiene fuentes ni agua corriente pero que suele tener de todo, literas, gas para cocinar, emisora de radio de emergencia y desde 1961 en que fue construido con la cúpula de una batería antiaérea de un portaaviones americano, increíble.

Nos paramos en el Collado de Horcados Rojos desde hay unas excelentes fotos del siempre mítico Naranjo de Bulnes.

Giramos a nuestra izquierda y recomendable que antes de ascender al Pico Tesorero hagamos una cómoda subida, que incluye alguna trepadita, a los Urrieles, a 2500 metros, con un sorprendente agujero natural. Y, en unos metros, siguiendo su arista, y realizando algunas trepadas por bloques llegaremos a la cumbre del Tesorero a 2570 metros en dos horas y tres cuartos, sin contar parad
as.

La bajada por el camino que nos lleva a Horcados Rojos siguiendo los hitos que se ven mejor al bajar desde la cumbre.

Bonito día, si señor.


sábado, 30 de mayo de 2009

La Mira en Gredos


Subida hecha en dos ocasiones, la primera directamente desde Guisando y la segunda por la ruta conocida como desde la Mira al Morezón.

La primera opción comienza en el aparcamiento del Nogal del Barranco a 1095 metros de altitud, cerca de Guisando, a donde se llega desde Arenas de San Pedro, para ascender por la garganta de los Galayos, un camino que se inicia en el aparcamiento de la Plataforma del Nogal, senda muy cómoda al inicio, con sombra de un denso pinar hasta los 1300 metros de altura, y, más o menos,  hasta llegar a la fuente del Amanecer, a 1400 metros de altura, en algo menos de una hora, en el mismo sendero, poco más adelante, después de un tramo de zetas llegaremos a una fuente con agua muy fresca, la fuente Macario, a 1550 metros de altura, hay un momento en que aparece, bien visible, el refugio Victory, detrás suyo la pedrera que conduce a La Mira, a nuestra derecha Los Galayos, a nuestra izquierda la cima de La Mira.

Seguimos hasta llegar a algo más de tres kilómetros desde el aparcamiento, más o menos a 1700 metros de altura, donde al llegar al cruce del arroyo de los Galayos, empieza la llamada Apretura, hacia la izquierda sigue el camino actual, por la derecha, aunque poco visible sale la antigua senda, incomoda por una pedrera y pegada a la pared de los Galayos, por lo que no son visibles, por eso y por el riesgo de desprendimientos, es mejor hacia la izquierda, por la denominada senda de las Zetas, en unas dos horas y media desde el aparcamiento se llega al Refugio Victory después de 5,5 kilómetros de recorrido, contemplar las increíbles vistas desde el refugio y pasar a descansar un ratito en el refugio  propiedad del Club Peñalara de Madrid, construido en 1949 y que está a 1950 metros de altura.

Decidimos continuar y tomamos la pedrera que baja desde la cara Oeste el Gran Galayo para dirigirnos hacia la Portilla, bien visible y evidente, que da acceso a la pradera de los Pelaos, el sendero está bastante bien señalado de hitos, pero nos vendrá la tendencia a tirar hacia la derecha, error, nuestro objetivo es la portilla que tiende algo hacia la izquierda, estamos en una subida bastante penosa por la cantidad de piedra descompuesta que hay.

Al llegar a la Portilla giramos hacia la izquierda, es evidente la cima de la Mira, pedreras suaves que nos llevan al pico de la Mira a 2341 metros, las vistas del macizo de Gredos son espectaculares, al Este las crestas de Los Galayos, la Peña Mediodía, el Torozo y el Puerto del Pico, hacia el Oeste el Circo de Gredos, claro con el Almanzor, con La Galana, con el Ameal de Pablo.

El descenso lo hicimos por el mismo camino. Recorrimos en total cerca de 12 kilómetros con una subida acumulada de cerca de 1300 metros en cerca de 6 horas.

La segunda opción, mas pesada, además nos coincidió con un buen día pero con una nieve blandísima que nos obligó a ponernos y quitarnos las raquetas en repetidas ocasiones.

Pretendíamos hacer la ruta que parte desde el kilómetro 6 de la carretera entre Hoyos del Espino a la Plataforma, donde dejamos los coches, hasta el Puerto del Peón, desde allí subida a La Mira, continuar al Puerto de Candeleda, el Morezón, Los Barrerones, La Plataforma y vuelta a donde dejamos los vehículos, no hicimos el Morezón debido a la gran paliza con las raquetas por la nieve blanda y además, al bajar, lo hicimos por la ladera contraria al arroyo paralelo a la Plataforma, el cual con un gran caudal por el deshielo, tuvimos que cruzarlo encordados y mojándonos hasta las orejas, bueno una aventura mas.

viernes, 29 de mayo de 2009

Posets por el Ángel Orús, mi primer tres mil


Fue la primera vez que ascendí un tres mil en Pirineos, es por ello que le tengo un cariño especial, después he vuelto a subirlo alguna vez y no, no es lo mismo, ya no me produce la misma sensación, es todo como ver una muy buena película, pero verla otra vez, ya sabes el final y mientras que otras ascensiones me piden volver a repetirlas, esta, una vez superada, ya no me lo pide mas ¿porqué?, no lo sé, ya que es cierto que es una montaña preciosa, pero esos son mis sentimientos.

Siempre desde Eriste, un precioso y tranquilo pueblo de 173 habitantes censados y con un casco urbano digno de ver, con el precioso embalse de Linsóles a su lado, con una altitud de 1118 metros, antes de Benasque, y tan poco antes, que a veces, a Benasque voy andando, cerca sí, pero de manera incomoda por la carretera hasta que descubrí hacerlo por Anciles.

El macizo del Postes (también llamado el Virrey del Pirineo) está en el Norte de la provincia de Huesca, ubicado entre los valles de Estós, Chistau y Eriste, dentro del parque natural que lleva su nombre, es una montaña con una silueta trapezoidal que la hace fácilmente identificable.

La ascensión al Posets (o Tuca de Llardana) con sus 3375 metros de altura, el segundo pico más alto de Pirineos después del Aneto, supone una subida con un desnivel acumulado de 1300 metros desde el refugio y otros más de 1000 desde Eriste, de las dos veces que lo he ascendido la primera lo hice directamente desde Eriste y la segunda lo hice subiendo el primer día al refugio de Forcau (Angel Orús) y al día siguiente haciendo la ascensión y bajando después hasta Eriste. En cualquier caso, desde el refugio, situado a 2295 metros la ascensión puede llevarnos unas cuatro horas y otras tres de bajada y la distancia de Eriste al refugio puede ser de unas dos horas largas al subir y más de una hora y media al bajar hasta Eriste, aunque puede hacerse parte en coche, siempre y cuando que el aprecio que le tengamos a la suspensión y sus bajos no sea excesivo, hay también la opción de dejar el coche en Eriste y subir andando por una senda que sale de la parte Oeste del pueblo de Eriste, a 1118 metros, y que sube por la margen derecha del barranco hasta enlazar con la pista en el puente de Tramarios, a 1245 metros de altura.

En cualquier caso, la subida hasta el refugio, desde Eriste, sale al final del pueblo, en dirección a Benasque y tras pasar una inmediata central eléctrica, un cartel señala hacia la izquierda el desvío al Ángel Orús, a partir del aparcamiento se señala como PR-11, un camino que parte a la derecha del aparcamiento y que no tiene pérdida, está bien marcado y habitualmente bien transitado, en coche hasta los 1500 metros de altura de la pleta del Estallo, cerca de donde está la cascada de Espigantosa, son unos cinco kilómetros, los dos  primeros más o menos asfaltados y los siguientes de piedra suelta. Poco después de empezar a caminar se pasa junto a la cascada de la Espigantosa, a 1550 metros, obligatorio, si o si las fotos de rigor,  seguimos, para en media hora larga, llegar a los 1780 metros del puente del Presentet, para llegar después a los 2100 metros del altura del refugio Ángel Orús, en otra hora y cuarto.

El refugio Angel Orús tiene lo mejorcito del Pirineo, muy bien montado, muy cómodo, buenos baños y duchas, casi un lujo en montaña y lo peorcito, pocas veces han sido tan estrictos en los horarios de cena, que pienso debe ser así, pero siempre con un mínimo de flexibilidad, pero bueno.

Desde el refugio, comienza una senda en dirección NO que se eleva por pastizales y escarpes de granito, para en unos tres cuartos de hora dejarnos en un cartel de señalización, a 2350 metros de altura, y cuando se lleva una hora caminando por ella se atraviesa el torrente de Llardana, media hora más tarde, tras seguir ganando altura, llegamos a la desembocadura de la Canal Fonda, a 2630 metros de altura, cuyo abrupto corredor hemos de atravesar. Se ve claramente el sendero que asciende por las pendientes de rocas y los neveros.

Este tramo del recorrido también se conoce como Ruta Real. A su término, tras tres horas de marcha, encontramos la fantástica aguja del Diente de Llardana, a las dos horas y tres cuartos de salir del refugio, estamos a 3010 metros.

Seguiremos a nuestra derecha, al NE, por el sendero que, entre canchales, nos lleva a la cresta de la Espalda del Posets y de ahí, en un total de cuatro horas, llegar a los 3375 metros de la cumbre, que tal vez pueda considerarse el mejor mirador natural del Pirineo aragonés, dada su más que respetable altura y que en sus proximidades ninguna montaña llega a sus cotas, pero las cimas del Gran Bachimala, el Gourgs Blancs y el Perdiguero hacia el Norte o el Aneto y la Maladeta hacia el Este, son perfectamente visibles desde esta cima.

Es, en suma, una montaña en la que hay que tener cuidado con los neveros y los rápidos cambios de tiempo, en suma una montaña fácil, pero para montañeros y senderistas experimentados y bien equipados.

jueves, 28 de mayo de 2009

Peñalara, siempre a mano


Ese maravilloso parque donde tantas caminatas hemos hecho, el circuito típico de Cotos, cumbre de Peñalara, Claveles, Risco de Los Pajaros, Laguna de Los Pajaros, Laguna grande y vuelta a Cotos, subidas con distintos amigos pero, sobre todo con Fernándo, cuantas veces hemos subido a Peñalara y que bien la hemos disfrutado.

En verano en esos días tan fantásticos, buscándo mi rincón preferido de la sierra madrileña, el valle de Pedro Hernándo, en invierno tirando de piolets y crampones en las palas detrás de la Laguna Grande o escalando esos pequeños riscos de hielo en la pared negra.

¿Que tiene que envidiar Peñalara en invierno? nada, grietas, balcones a punte de derrumbarse, aludes, nieve, hielo, buenas pendientes, todo, tiene de todo.

Subiendo a celebrar el fin de año con los amigos de V+ en las navidades del 2008 con nuestras botellitas de sidra y nuestros dulces, ¡que bonita tradición! ...
Con Africa en las navidades del 2009 ¡¡que mal tuvimos !!.

Escalando en las paredes del Zabala, en la placa Teresa, tanto en deportiva como en clásica.

En suma un disfrute para el deporte, para el descanso, para las practicas, para las buenas relaciones con amigos.

Pero quizá, la vez más emocionante para mi ha sido en Mayo del 2015, cuando antes de hacer tres meses de mi lesión de rodilla (la triada) esquiando, he conseguido volver a subir a esta bellísima cima.


sábado, 23 de mayo de 2009

Chamonix


Cuando crees estar acercándote a Chamonix, aún en la autopista, de repente, frente a ti, la silueta del Mont Blanc y enseguida un área de descanso, la primera vez que vas a Chamonix te paras sí o sí a contemplar esa enormidad de montaña. Y es ahí donde ya empiezas a respirar ambiente montañero, la llegada a Chamonix no hace sino confirmar las primeras expectativas, la ciudad no es que esté rodeada de montañas y glaciares a ambos lados es que todo en ella induce a pensar en montaña, es la base desde donde salen las ascensiones al Mont Blanc, es donde nacio el alpinismo y Chamonix, en Europa, es la capital de esta preciosa actividad.

Está llena de montañeros, llena de tiendas de material de montaña, de restaurantes donde se escucha la actividad hecha en el día o la que se intentará acometer mañana, con estatuas y fotos dedicadas a los pioneros de este deporte, sitios donde acceder a los mejores y mas fiables partes meteorológicos, una ciudad en sí que vive por y para la montaña.

Era mi meta ascender el Mont Blanc, pero antes tenía que entrenar y conocerlo y claro mi primera idea fue la de ir al glaciar de Mer de Glace, opción que procuro repetir cada vez que voy y siempre lo hago subiendo andando hasta Montenvers, una buena caminata, en algunos casos muy paralela al tren que hace el mismo recorrido, pero siempre lo preferiré andando, viendo enfrente toda la zona de Le Brévent y de la Flégère, viendo cada vez mas abajo Chamonix, y todo ello por un camino frondoso, espectacular, con muchas variantes como la que te conduce a Plan de L´Aiguille, llegar a donde los turistas lo hacen con el tren y, enseguida desaparecer de ellos cuando bajas las verticalísimas escaleras que te conducen hasta el glaciar, caminar por encima

de él tanto con crampones como sin ellos, practicar en sus grietas, en suma disfrutar del hielo.

O subir en el telecabina que nos deja en la Aiguille de Midi a sus 3842 metros (ojo la subida en veinte minutos desde 1000 metros hasta 3842 puede provocar mal de altura), y asomarte por primera vez a la arista que conduce hasta el refugio de los Cósmicos y pensar, yo por ahí no, no y no, pero al final bajas, la primera vez temblando y las siguientes con toda la precaución del mundo.

Caminar por la nieve y el hielo desde la Aiguille de Midi hasta el Helbronner en la zona italiana recorriendo sus glaciares y dejando a un lado el Mont Blanc de Tacul, el Mont Maudit y sus innumerables y grandiosas grietas, la Brenva y al otro lado el Dent del Géant y su glaciar, en fin disfrutar del encanto de los Alpes, no sólo subiendo el Mont Blanc.


miércoles, 13 de mayo de 2009

Ocejón, un agradable paseo


Salimos desde Valverde de los Arroyos, un bonito, aunque excesivamente turístico pueblo, que merece la pena conocer, dejamos el automóvil en el aparcamiento que tienen habilitado, bueno tienen dos, uno para residentes y otro para visitantes que está arriba de una cuesta, mira que me fastidia cuando vas a ciudades o pueblos que tienen unos buenos ingresos procedentes del turismo, y sin embargo, tienen gestos en los que demuestran que aquel que les proporciona ingresos les molesta, en fin ...

Bueno, fotos en el pueblo un ejemplo de la llamada arquitectura negra de los pueblos de la sierra de Ayllón; casas de pizarra, pequeños balcones con macetas, marcos y barandillas de madera, calles adoquinadas y todo muy limpio eso sí.

Y a andar que a eso hemos venido, y nada mas salir del pueblo, pasando por delante del ayuntamiento en la plaza, con una bonita fuente, pasamos a través del campo de fútbol y se inicia una suave cuesta por la zona llamada de las Piquerinas, y por donde al igual que durante el resto de la jornada, el camino, rodeado de cerezos y castaños, está muy marcado y evidente, con atención a que a unos 500 metros apróximadamente el camino se bifurca en dos, el de la izquierda nos lleva directamente a las Chorreras de Despeñaelagua y el de la derecha es el que se dirije hacia el pico del Ocejón.

Paredes fáciles donde poder intentar alguna trepadita para quitar el mono y, enseguida la vista de la cascada de las Chorreras con una buena cantidad de agua. Bordeamos, por su derecha, el bosque de repoblación que se nos presenta detrás de las Chorreras y giramos hacia la izquierda, hacia la cumbre, justo donde nos encontramos con el camino alternativo que viene desde Majaelrayo.

Continúa la subida por la llamada Cuesta del Calvario, cuesta que no es dura en absoluto.

Llegamos al collado que hay antes de la cumbre donde aún quedan restos de algunos neveros y, hacia la izquierda las últimas cuestas que en algunos tramos

tienen las típicas colocaciones que las convierten practicamente en escaleras, unos minutos más, y ya estamos en la cumbre con sus 2049 metros de altura donde hacemos las fotos de la espectacular panorámica de la Sierra Norte y de los campos de Guadalajara, Los Montes de Ayllón, la Reserva de Sonsaz, Majaelrayo, Valverde de los Arroyos, Cantalojas, el Pantano del Vado, la Campiña, el Alto Rey, un sinfín de sitios.

Hace un viento desagradable así que, en vez de tomarnos el tentempie en la cumbre, bajamos un poco y cuando se para el viento nos sentamos a tomar los buenísimos sandwichs de tortilla que trae Fernándo, seguimos la bajada hasta Valverde, total dos horas y poco en subir, a marcha tranquila y algo más de una hora en bajar.

martes, 12 de mayo de 2009

Un dia en Cabezas de Hierro


En nuestra magnífica Sierra de Guadarrama, en esta primavera que nos ha llegado después de un invierno tan lluvioso y con tanta nieve que nos han dejado no sólo unos pantanos llenos sino que además nos ha puesto un maravilloso tapiz verde en todas las montañas.

Félix y yo quedamos en el Puerto de Cotos, al ser un día de trabajo casi estamos sólos, preparamos mochilas y eso sí, precavidos que somos, cargamos con piolets y crampones por lo que nos podamos encontrar, buen paseo les dimos pero sin mas uso, pisamos nieve pero no hizo falta usarlos.

Desde Cotos por la carretera que conduce a la estación de esquí de Valdesquí, unos diez minutos y encontramos un amplio camino que sale a nuestra izquierda y que tiene una barrera que impide el paso de vehículos, pasamos la barrera y enseguida llegamos a una pequeña explanada nos adentramos bien a la derecha y tomamos un sendero que, a través de un espeso pinar nos conduce hasta el refugio juvenil del Pingarrón.

Unos cinco o seis metros antes del refugio sale a nuestra derecha un camino que poco a poco va descendiendo en zig zags y que está señalado como RV1, ojo que la señalización es de vuelta.en otros diez o quince minutos de descenso vemos una pequeña pradera antes del arroyo de Guarramillas que se cruza por un puente de madera que está bien visible. Tomamos el sendero que sale hacia nuestra izquierda y en otros quince minutos estaremos en una planicie que nos permite ver a nuestra izquierda el macizo de Peñalara y a nuestra derecha los picos de Cabezas.

Siguiendo otros cinco minutos por el sendero, con las indicaciones de RV1 que nos seguimos encontrando, haciendo una bajada que nos lleva hasta el arroyo de Cerradillas con otro buen puente de madera, nada mas cruzarlo el sendero RV1 sigue hacia nuestra izquierda, pero nosotros seguimos de frente y hacia arriba, sin coger otro sendero, también evidente y subiendo hacia nuestra derecha, en dirección SE hacia Cabezas, nos internamos a través del bosque, con pocas indicaciones, pero sin mayor problema ya que a nuestra derecha seguimos viendo el arroyo Cerradillas hasta que salimos del bosque y enseguida veremos hitos que nos marcan la subida, en algunos momentos por pedreras, en otros momentos por piornales pero siempre encontrando los hitos y en alguna ocasión cruzando de nuevo el arroyo Cerradillas, y así llegamos hasta el collado, momento en el que, a nuestra derecha vemos el primero de los picos de Cabezas a 2383 metros, y mas a nuestra derecha el sendero que baja del primer pico para llevarnos al segundo, tomamos el camino a través de la pedrera, perdimos los hitos, pero daba igual, se veía perfectamente la cumbre a donde llegamos dos horas después de salir de Cotos.

Fotos de la Cuerda de La Pedriza, de la Bola, de Peñalara, del Montón de Trigo, del paisaje de Guadarrama en general, bajada del primer pico hacia el collado existente entre los dos picos de Cabezas, subida al segundo a 2374 metros, un tentempie y bajada hacia las ya abandonadas pistas de esquí, las cuales cruzamos a través de los piornales y las pedreras y poco después de nuevo por la carretera de Valdesquí hasta Cotos, bueno cinco horas de buen ritmo y un relajante día de montaña.

Pero no fué la primera vez, mas subidas con otros grupos, en solitario, en invierno, es otro de los clásicos de esta magnífica sierra que tenemos.

jueves, 7 de mayo de 2009

Cresta del Dragón o del Malcalzado en Ayllón

Buen sábado con el grupo de HC, fantástico tiempo y una ruta con chispa, sin ser peligrosa ni pesada, simplemente bonita, subidas, crestas, trepadas, destrepes, etc ..., en suma una de las típicas crestas de lajas verticales de la sierra de Ayllón.

Dejamos los coches en el Puerto de la Quesera y anduvimos unos pocos metros hasta tomar un camino hacia la izquierda por el que iniciamos la ruta hacia la Peña de la Silla con 1935 metros de altura, que es el primer vértice geodésico que subimos.

Ascensión sin riesgo alguno, en la última parte una pequeña trepadita y el esfuerzo no es tan grande, mas o menos unos trescientos metros de desnivel.

Primeras fotos, unos pocos metros de bajada y a continuar por la cuerda sin grandes complicaciones (no olvidemos que además de poderse hacer la ruta por la cresta, a unos metros discurre una senda paralela, bien visible, pero, en cualquier caso esta primera parte no tiene complicación alguna. Ya después de coronar la Peña de la Tiñosa (1950 metros) la arista se estrecha algo más, con hielo la arista sería algo peligrosa y en mojado habría de tener algo más de cuidado, pero al estar completamente seca el único peligro podría presentarse al pisar alguna laja que se moviera (de hecho pisamos más de una).

Más subiditas, más bajaditas, trepaditas y destrepes divertidos que, eso sí, hay que hacerlos con el debido cuidadín, nos llevan hasta el pico Atalaya que, sin ser una gran cumbre tiene unas buenas vistas hacia toda la sierra de Ayllón, el Cerrón, el Tres Provincias, el Pico del Lobo y su circo, el Ocejón, el hayedo de Tejera Negra, el pico de la Buitrera, en fin, toda la sierra de Ayllón, sobre todo en un día tan despejado como el que tuvimos.

Comidita, foto del grupo y el regreso, algunos por la senda paralela y otros nos fuimos haciendo un poco el cabra por la cresta de vuelta, se ve que teníamos mono. Y claro, al final cervecita en Riaza y vuelta en los coches.