domingo, 29 de noviembre de 2009

Ameal de Pablo


¡Pero donde vais con la que va a caer¡, bueno ya veremos, estoy un poco harto de las negras previsiones del tiempo, así que mucho caso no lo hacemos, eso sí, en lugar de irnos sábado y domingo nos vamos viernes y sábado que para eso estoy ya jubilado. Y el sábado la previsión es hacer la cresta de Cerro de los Huertos, Risco Moreno y Ameal de Pablo, pero bueno aunque el amanecer es precioso en el Congelador de Gredos (Refugio Elola) el frío es de aúpa, resultado nos hacemos sólo el Amael de Pablo y nos bajamos. Además al subir tropiezo con un hito y tiro parte de él y ya se sabe tirar un hito es mala suerte, con lo supersticioso que soy estuve todo el día acoj ...

Hago aquí el comentario y lo haré siempre que vaya a Gredos acerca del "caminito o senda" que las "mentes pensantes funcionariales" de la Junta de Castilla y León han hecho con el acceso desde la Plataforma hasta el Refugio Elola, vamos a ver, vale que en algunos tramos lo simplificaran un poquito a pesar de que tampoco era necesario, pero lo que no vale es el pedregal que han hecho en la senda, piedras incomodísimas para andar ¿han consultado con algún médico que les diga el daño que esas piedras producen en las rodillas?, no, me temo que no, ¿han pensado que en las heladas se forma verglas encima de esas piedras con el enorme riesgo que eso significa?, no, me temo que no, ¿han pensado que al encauzar el terreno, en lluvias todo el agua se va al camino provocando un barrizal escurridizo tremendo? no, me temo que no, eso si, si que han visto que junto al camino se ha formado un sendero y ¿han pensado en porqué la gente desprecia ese maravilloso camino en que se han gastado el dinero de los contribuyentes y que no sirva para nada?, no, lo que si han pensado es que no les obedecemos ooohhh y, entonces qué, pues esas maravillosas "mentes pensantes funcionariales" se han gastado más dinero y han llenado de piedras y cortes el sendero paralelo que la gente ha hecho, es decir en su falta de humildad y exceso de soberbia lo que piensan es en seguir prohibiendo en lugar de analizar el porqué la gente desprecia esa obra y se va por el lateral. Bien, bien, así nos va.

En suma dando caña, hora y media larga hasta el Elola, estamos sólos con los del refugio, cenamos en la cocina con ellos y a dormir, nubes y no muy buenas previsiones para mañana, pero eso si a dormir solito en una habitación para mi "sin ronquidos que maravilla". Amanece un día perfecto, frío pero soleado, a por ello.

Salimos por la senda que se inicia por detrás del Refugio con la indicación de La Galana, con mucho cuidado hasta que lleguemos al sol, a donde llegamos cuando ya vamos a iniciar la trepada al Ameal. Antes subimos por el canal de los Geógrafos con alguna patinadita a pesar del cuidado que llevamos y algún rodeo al pasar por zonas de río helado, la subida es empinadilla y en menos de hora y media llegamos a la zona de las primeras trepaditas hacia el collado que separa el Risco Moreno del Ameal de Pablo, siempre incluso en esta zona con bastantes hitos en el camino. En ocasiones hay que echar mano a la roca para superar algunos de los pasos.Unos metro

s antes de llegar al collado, hacia nuestra izquierda comenzamos la trepada, también muy señalizada con hitos. La secuencia de hitos, casi siempre en nuestra mano derecha, nos van remontando para poco a poco llevarnos hacia casi la cumbre. Antes de la trepada final, aproximadamente a unos quince metros del collado, dejamos detrás un patio hacia el collado entre Ameal y Risco Moreno y aparecemos de nuevo en la vertiente del Gargantón y de la Galana, seguimos estos pequeños metros ascendiendo hacia la antecima del Ameal, allí, a la derecha nos encontraremos con un bloque bastante liso pero con una par de grietecillas suficientes para poder encaramarnos hasta la cima. Arriba y ¡¡cima!!.

Un viento fuerte y la vista del mar de nubes que se divisa detrás del Circo de Gredos nos hace pensar como en un ejercito preparado para el asalto, es decir las tormentas están ahí, vienen ya, fotos a un lado Almanzor, Cuchillar de Ballesteros, mas a lo lejos en una primera fila Morezón, Ventana, Hermanitos, Casquerazo, etc... detrás y después del primer mar de nubes sobresalen La Mira y Galayos y mas atrás vemos el Pico Casillas, detrás La Galana, la Portilla del Rey y el Pluviómetro y a nuestro lado la cresta de bajada del Ameal, Risco Moreno y Cerro de los Huertos, ¿que más se puede pedir?, venga, abajo, que viene la nevada.

La vuelta se hace por el mismo sitio, prestando especial cuidado a la primera parte de la bajada por la piedra suelta que nos encontramos que además, donde no le ha dado el sol sigue con hielo.

Parada en el Elola y vuelta por los Barrerones, además de la obrita de marras siempre, al volver, se me hacen pesadísimos ¿será además por la carga que ya llevamos en las piernas?.

viernes, 20 de noviembre de 2009

Peña de Chilla en el espaldar del Circo de Gredos


Iniciamos la subida desde el Santuario de la Virgen de Chilla a donde se accede desde el centro de Candeleda por una carretera pintoresca (las indicaciones hacia el Santuario son constantes desde Candeleda), el sitio es bellísimo, fuentes con buena agua, exuberante vegetación, aparcamiento y buen acceso. Desde sus 680 metros de altitud iniciamos la subida hacia la Peña de Chilla a sus 2009 metros de altura, buen desnivel a subir, así fue qué, como además en la bajada nos desviamos por otro camino en nuestro afán de descubrir nuevos sitios, terminamos bajando a trocha por entre helechos durante mas de hora y media, por tanto de las siete horas iniciales previstas tardamos ocho y media, con el temor, a pesar de que llevamos frontales, de que se nos hiciese de noche.

Salimos del Santuario por una pista forestal que deja a la derecha la fuente de los cuatro caños y a la izquierda el Santuario, según empezamos a subir dejamos a nuestra izquierda unas preciosas gradas de piedra, la pista tiene muy a su principio, una desviación de buen cemento hacia su derecha que no debemos tomar, unos diez minutos mas adelante la pista se bifurca en dos y, en buena lógica, el famoso Murphy , elegimos la que no era, es decir la de la derecha que nos llevó hasta su finalización, y tuvimos que subir una loma a trocha y sin camino, simplemente por mera intuición. Si hubiésemos seguido la pista de la izquierda, mas o menos a los treinta minutos de la salida desde el Santuario hubieramos encontrado un sendero con buenos hitos a nuestra derecha que es con el que enlazamos nosotros después.

Seguimos en dirección norte entre helechos en dirección Norte y divisando desde un principio el espaldar del Circo de Gredos adentrándonos en la Garganta del Río Chilla entre robles y enebros poco a poco más escasos, pero entre un verdadero mar de helechos, pero con la vista al fondo de la Portilla de los Machos, el Casquerazo, el Cuchillar de las Navajas, el Sagrao, la Portilla Bermeja.

El camino es suave, algunos descensos y ascensiones suaves atravesando la llamada Vega de la Zarza entre las casetas de pastores unas ya convertidas en re

stos y otros en perfecto uso. Seguimos siempre por la margen izquierda (de bajada) del río hasta que, es evidente que tenemos que cruzarle, y así lo hacemos.

Comienza entonces una fuerte pendiente bien señalada con hitos y vemos muy evidente a nuestra izquierda el Collado del Sillao de la Peña de Chilla, nos olvidamos de los hitos, que nos llevarían hacia el Almanzor y nos dirigimos por las rampas hacia el collado desde el que vemos la Peña Asperón, la Garganta Tejea, etc.

Una vez en el collado vemos a nuestra derecha el Almanzor (norte) y a nuestra izquierda la subida a la Peña, cuando llegamos a lo que pensábamos que era la cumbre vemos que es la antecima, alguna foto en dirección al Almanzor y hacia las impresionantes laderas del otro lado de la Peña.

Cumbre, fotos y para abajo que las nubes llegan muy espesas.

El descenso lo intentamos hacer por la cuerda del pico de Descargaderos, pero, o nos pasamos o no llegamos, el caso es que viendo que se nos puede caer la noche, anochece muy pronto ya, a las seis, decidimos tirar por la vía de enmedio y bajar entre helechos en unos momentos, piornales en otros, pero sin camino hacia el río Chilla, cruzarlo y volver al camino inicial de subida.

Resultado, en lugar de siete horas de actividad, cerca de ocho y media, pero han merecido la pena y si no veamos las fotos que nos dan una idea del excelente paisaje recorrido.

miércoles, 4 de noviembre de 2009

Montgó, buen paseo cerca de la playa



El parque del Montgó, situado en la comarca de la Marina Alta, en Alicante, fue declarado como Parque Natural en el año 1987 y ocupa una superficie de 2500 Ha, entre los términos de Jávea y Dénia, es paralelo a la costa y tiene una altura máxima de 753 metros y puedo decir que las vistas hacia la costa (Dénia, Jáve, Cabo de San Antonio, Puig Campana y si el día está despejado podemos divisar Ibiza) o hacia el interior desde la cumbre son majestuosas.

Desde que vendí la casa de Dénia tenía la intención de recorrer el macizo del Montgó, nunca lo hice en mi estancia en Dénia, pero al final, este mes de Abril del 2009 decidí hacerlo.

Un día de paseitos por las bonitas calas de la Granadella y de Moraig y al siguiente al Montgó.

Tenía una habitación en un hotelito cercano al puerto de Dénia y arranqué desde allí andando hacia la avenida del Montgó y hacia las colonias, me perdí un par de veces por las callejuelas finales, pero al final conseguí dar con la Ermita del franciscano Pare Pere, construida hacia los 80 y donde se retiraba a rezar en el siglo XVII, merece la pena pararse a ver en cerámica su historia.

Un sendero, bien balizado, que tomo a la salida de la Ermita y que, enseguida me deja en un corte de la pista con una cadena, que trasvaso y que me lleva en sus primeros pasos por una pista que rodea el Montgó por la base de la montaña en dirección al mar, voy hacia la derecha, donde poco después se convierte en sendero ascendente, con zig-zags para facilitar la subida. A media altura (unos 330 metros sobre el nivel del mar) encuentro el desvío a la Cueva del Agua, aquí hay una indicación que marca a la derecha la cima del Montgó y, a la izquierda a la Cueva del Agua, las dos rutas son válidas para acceder a la cima, eso sí la de la derecha, la que indica como directa a la cima, más larga sin embargo, tienes unos pasos algo complicados para personas que tengan vértigo lateral. Sigo la opción de la Cueva del Agua durante un rato pero al final , hay una indicación hacia la cueva que se desvía del camino elegido, lo sigo y encuentro un cartel de las autoridades del Parque Natural del Montgó, en el que no permite el paso por peligro, ¿a qué?, bueno, al fin y al cabo una prohibición más, ¿qué se puede hacer?, la Cueva del Agua conserva una inscripción del 238 D.C. que recuerda el paso de la legión VII Gémina.

Resultado, vuelvo unos metros sobre mis pasos a la búsqueda del camino que me lleva hasta la meseta, enseguida sale por mi derecha un camino que es el que viene desde Jesús el Pobre y que se une aquí con el que yo estoy llevando. A unos 500 metros de altitud, desde allí un sendero entre los matorrales me lleva, pasando junto a una pequeña ascensión culminada con una cruz, la Cruz de Dénia, a 695 metros de altura, con posibilidad de subir a ella, hasta el punto más alto del parque, la cima del Montgó.

Bocadillito junto al punto geodésico. Poca gente, he subido muy pronto y decido comenzar la bajada por la vertiente sur-este, hacia Jávea, mirando al mar y, menos mal que he decidido bajar, ¡que cantidad de gente subiendo! bonitas vistas al mar, a Dénia, a Javea, incluso con buen día puede observarse el Peñón de Ifach y, hasta el Puig Campana dos horas largas para la subida y, para la bajada, que la hago hasta la Ermita del Pare Pere bordeando la base del Montgó, se hace más larga, dos horas y media.

Un pequeño destrepe que me deja en un sendero de innumerables zig-zags a cuyo final aparece la cueva del Camell, donde tomo el camino que rodea parte de la base del Montgó, (aquí existe la opción de bajar hasta el Campo de Tiro de Dénia, otra opción donde dejar el coche y hacer la ruta). A partir de aquí un largo camino por una fácil pista hasta llegar de nuevo a la ermita del Pare Pere y bajar hasta el puerto, paellita, paellita ...

Conviene no hacer la ruta en días de mucho calor, la parte superior es una solanera y, en una segunda ocasión en que subí, a una compañera le dió un golpe de calor y tuvieron que bajarla en helicóptero.


domingo, 1 de noviembre de 2009

Bisaurín desde Lizara y valle de Hecho


El Bisaurín no es un monte técnico, eso sí, es una pateada de subida impresionante, desde el refugio (magnífico, buenas habitaciones, servicio todo el año, amabilidad, buena comida, muy bien, muy bien) de Lizara a 1540 metros de altura hasta la cumbre a 2669, te metes un desnivel de 1150 metros para el cuerpo de mucho cuidado, pero pocas veces te encuentras con unos paisajes así, y para postre, el descenso por el valle hasta Jasa, es espectacular ahora en otoño, aunque en el refugio me decían que es tan espectacular o más en invierno. Bueno habrá que hacerlo en invierno, seguro que merecerá la pena.

El acceso, de lo mejor, por una pista forestal pero que está bien asfaltada hasta el pie del refugio, esto ya te da un plus de no tener que hacer una ascensión cargado con un mochilón, subes con lo justo que necesites y el resto lo dejas en el coche.

La subida se inicia desde el mismo refugio, tomando una pista de tierra que deja el refugio a su derecha y, en pocos minutos se llega a un collado desde el que se divisa el refugio, allí nace un sendero hacía la derecha que no hay que tomar, seguimos claramente por la pista forestal que, al igual que el resto del camino está señalizado con las franjas roja y blanca de GR y, al tiempo con las blanca y verde de PR, nos encontramos con un abrevadero, más adelante con un muro que proteje la pista y más adelante aún con otro abrevadero. Hemos dejado a nuestra izquierda el barranco de la Cueva y ahora ya vemos, frente a nosotros el collado del Foratón al que, por un camino que hace grandes zetas para facilitar la subida, llegaremos a sus 2030 metros de altura uniéndose con el camino que viene desde Gabardito, más o menos habremos tardado hasta aquí, sin paradas uno hora y media.

Divisamos la pared sur del Bisaurín y la pendiente que hay que subir, pendiente que, en su tramo medio y final se lleva a cabo por una pedrera muy gastada e incomoda, aunque puede hacerse varios tramos bordeándola, siempre y cuando que no perdamos de vista los hitos.

Llegamos, después de algo más de una hora de subida a un colladín, desde donde se ve la espectacular pared norte del Bisuarín y desde donde contemplamos el Castillo de Acher, imprescindible una foto aquí.

La subida a la cumbre por la cresta cimera, sin problemas, aunque se nos advierte que, con nieve no nos arrimemos mucho a la arista, ni tampoco en la cumbre, ya que pueden romperse las típicas aristas que caracterizan esta montaña con el consiguiente peligro de caída.

En la cumbre, quizá la de las vistas mas espectaculares, en un día como hoy, Aspe, Aguerri, hacia otro lado Anayet, Midi, hacía el Norte Castillo de Acher, Aguas Tortas y, sorprendente, ¡¡¡ hasta el Moncayo !!!, bajada al refugio, saludos y despedida y ¿se acabó el día?, no, no, increíble, cuando llegué ayer lo hice de noche, no pude, por tanto, admirar el bosque, desde el refugio hasta llegar a Jasa, pasando por Aragües del Puerto me paré más de diez veces cámara en mano, no paraba de hacer fotos de un lado a otro, que maravilla de valle. Insisto, volveré en invierno, no quiero perdermelo.

Esta actividad también ha sido realizada desde el refugio Gabardito al hacer la Senda Camille.