Quería subir el Pico de San Lorenzo en la Rioja y conocer la sierra de
la Demanda, fin de semana por tanto en la Rioja, en la zona inmediata a la
sierra de la Demanda (llamada así debido a la "demanda" que en su día mantuvieron entre los pueblos de Monterrubio y Barbadillo).
Santo Domingo de la Calzada debe su nombre a la calzada que el eremita
Domingo, educado en el cercano Monasterio de Valvanera y después ayudante del
legado papal Gregorio de Ostia, se encargó de mantener, mejorando la vieja
calzada romana en el siglo XI, para así, facilitar la ruta de los peregrinos
que se dirigían, a través del Camino Francés, hacia Santiago de Compostela. En
memoria de aquel monje se alzó la preciosa catedral de Santo Domingo de la
Calzada, su campanario es la torre más alta de La Rioja, 70 metros. Y todo en
esta ciudad, los restaurantes, los dos paradores nacionales (el de Bernardo de
Fresneda y el de Santo Domingo, que en principio fue el albergue de
peregrinos), el actual albergue de peregrinos, el Centro de Interpretación del
Camino, la Hospedería Cisterciense, etc., todo parece estar dedicado al Camino deSantiago, no
en vano es la parada más importante de la ruta jacobea entre Puente la Reina y
León.
Visita obligada en la zona es la villa de San Millán de la Cogolla, donde los Monasterios de Yuso y Suso, cuna de la lengua española, han conseguido que la zona sea declarada Patrimonio de la Humanidad.
Visita obligada en la zona es la villa de San Millán de la Cogolla, donde los Monasterios de Yuso y Suso, cuna de la lengua española, han conseguido que la zona sea declarada Patrimonio de la Humanidad.
En el Monasterio de Yuso, además de una maravillosa hostería se
encuentra ubicado el Centro Internacional de Investigación de la Lengua
Española, no podemos obviar que fue aquí, en los Monasterios de Yuso y Suso
donde nació la lengua española, como lo demuestra el descubrimiento en Yuso de las Glosas Emilianenses del
siglo X, así como, según la tradición, Gonzalo de Berceo, en Suso, escribió los
primeros poemas de la lengua española.
Y ya Ezcaray, la capital del valle, pueblo típico de estación de esquí,
con sus múltiples barras para hacer una buena pista de aperitivos y pinchos,
pero bonito, desde donde salen innumerables senderos para recorrer la sierra de
la Demanda como el GR-93 que recorrí años más tarde, una larga cadena montañosa, al noroeste del sistema Ibérico, con
varias cimas que superan los 2000 metros, San Millán en Burgos con 2131 metros
y el objetivo de hoy, el San Lorenzo de 2271 metros, el más alto y, ojo, el más
frío, se han registrado menos de 20 grados negativos en alguna ocasión.
Desde Ezcaray, saliendo por uno de los puentes que cruzan el río Oja (se
dice que el nombre Rioja nace de río Oja, bueno es una frase mas), en dirección
a Posadas hasta que a tres kilómetros nos encontramos una desviación que hacia
la izquierda nos subirá al amplio aparcamiento de la estación de Valdezcaray en
otros trece kilómetros de buena carretera.
Aparcamos aquí el coche y Jesús y yo, comenzamos a andar, solos, la
temporada de esquí aún no ha comenzado y la niebla hace desestimar a la gente
hacer actividad alguna por la zona, así que desde los 1530 metros de altura del
parking de la estación empezamos a caminar.
Hay varias rutas que pueden hacerse, andando directamente desde Ezcaray
atravesando el espectacular hayedo de Bonicaparra, con su espectacular colorito en otoño, hacia la llamada campa de Sagastia (GR-93) a 1200
metros, desde aquí hasta el collado de Beneguerria a 1730 metros para llegar al
collado de Ormazal y seguir al Portillo de Nestaza, encima de las pistas de
esquí enlazando con la cuesta a la cima en unas cuatro horas y media en total.
Otra opción es, desde el Monasterio de Valvanera, donde nace una ruta que nos
lleva hasta el collado del Bierzo a 1520 metros de altura, y por la arista de
los Pancrudo hasta el Cabeza Parda de 2119 metros y descender hasta la Portilla
de Nestaza uniéndose con la opción anterior.
Nosotros, debido a la espesa niebla, decidimos tomar la pista que sale
junto al parking y que inmediatamente deja el asfalto, y paso a paso (aunque
nosotros, a pesar de la niebla nos salimos en diferentes ocasiones para
acortar), alcanzaremos el final de los telesillas superiores, después de
recorrer algo más de dos kilómetros y medio en menos de una hora hasta la cota
de 1950 metros, detrás de la cabina final, en dirección sureste sale una senda
que zi
gzaguenado nos llevará hasta la cima en cerca de dos horas.
gzaguenado nos llevará hasta la cima en cerca de dos horas.
La espesa niebla no nos permite casi ni distinguir los hitos cimeros, la
placa a San Lorenzo, el vértice geodésico, el monumento de la Hermandad de
Donantes de Sangre, por lo que intentar ver las cercanas sierras de Urbión,
Gorbea, Neila, Moncayo, etc… se hace imposible, gracias a que Jesús se conoce
al dedillo la zona bajamos en dirección sureste para faldear el pico hacia las
puntas finales de los remontes de la estación de esquí y bajar siguiendo las
pistas.
Es una visión dantesca observar, cuando no hay nieve, el deterioro que
hacen estas instalaciones a la montaña.
Llegamos a los coches, no ha subido nadie mas y las instalaciones están
cerradas a cal y canto, así que nos bajamos a tomar algo en Ezcaray, que nunca defrauda.
Bien, una más de mis actividades para completar el proyecto de subir hasta el pico más alto de cada comunidad autónoma.
Un gran pico como es éste no merece esa salvajada. Aunque a la gente de Ezkaray le irá bastante bien que exista esa estación. Rompe mucho el paisaje, ciertamente, aunque siempre es gratificante ir al monte, más bonito o menos.
ResponderEliminarMenuda niebla os pilló.
ResponderEliminar¡Cuántos sitios que no conocemos!