Es la segunda cumbre en altura (2565 metros, 20 menos que el Almanzor) de todo el Sistema Central, pero al tiempo, no es la más visitada, sigue siéndolo su cumbre vecina, el Almanzor (la próxima vez, con mas tiempo, haremos la subida a La Galana y la cresta hasta el Almanzor para bajar desde él), sin embargo, su ascensión es para mí, mucho mas atractiva. Tiene las mejores vistas de Gredos y su ascensión, además de pasar por lugares solitarios, tiene de todo, palas entretenidas, pedreras, praderas y hasta una divertidísima trepada final, sin olvidar un desnivel importante desde La Plataforma, de 1300 metros, con una dificultad típica de un recorrido alpino y una duración estimable, en total de ocho a nueve horas.
Aparcamos el coche a primerísima hora en La Plataforma y comenzamos la subida por la empedrada Trocha Real. Después el atravesar el Prado de las Pozas, da lugar a tomar el aliento antes de la subida definitiva a Los Barrerones. Desde este fantástico mirador sobre el Circo de Gredos, continuamos por el amplio y cómodo camino que se dirige a la laguna Grande, que una vez bordeada, te deja sin dificultad alguna, en el refugio Elola. Parada, saludos, un tentempie, información de la situación, y a comenzar la verdadera ascensión.
Tomamos una senda marcada con hitos que parece dirigirse hacia la Hoya Antón en diagonal ascendente pero que, tras pasar unas praderas abrigadas entre grandes bloques, gira bruscamente a la derecha para entrar en la Canal de los Geógrafos. A media subida, hay un estrechamiento que pasamos justo por la derecha del cauce, teniendo que trepar unos metros.
Desde ahí fuimos rodeando por la base del Ameal de Pablo hasta salir a una portilla desde donde vimos el Almanzor a la izquierda y la depresión del Venteadero delante. Tras rodearla por la derecha, flanqueando el Ameal de Pablo, llegamos a las lagunas y continuamos por la propia Portilla del Venteadero. Una vez en la cresta, nos dirigimos por lo alto de la misma hacia la derecha por una cuerda ancha y pedregosa hasta alcanzar el pie de la Galana. Unos hitos nos llevan hasta la pirámide de grandes bloques que rodeamos por la izquierda para salir a un rellano junto a la Muesca de la Galana. Para acceder a la misma, destrepamos unos metros nivel II+ por una placa muy fisurada.
Desde la horcada, bajamos unos pocos metros por la vertiente derecha hasta un giro que permite, por el otro lado y trepando por él, salir a la arista sur de la Galana, alcanzando la cumbre mediante una trepada aérea y entretenida de grado III por grandes bloques. Al final, por una impresionante cornisa estrecha e inclinada se llega a la cumbre, que no es más que un bloque sin apenas espacio para sentarse, pero con unas magníficas vistas sobre Cinco Lagunas y el cordal del Ameal de Pablo.
Y la bajada, por el mismo camino, eso sí, con una parada en el Venteadero (que bien saben los bocadillos y el queso que llevó Ricardo), con el susto que se llevó Félix cuando una piedra que se les escapó a unos escaladores en el Ameal de Pablo estuvo a punto de alcanzarle y con el fenomenal bañito en la laguna Esmeralda antes de llegar al Elola, nueva paradita y hasta la próxima, eso sí si todo el recorrido se hace en el día, que larga se hace la vuelta por Los Barrerones.
Qué buena descripción de un itinerario que yo trataré de hacer el primer fin de semana de julio. Me refiero al completo (ya que estamos en verano), enlazando Almanzor y Galana. Hace años que no visito Gredos y tu relato me ha devuelto las ganas de hacerlo.
ResponderEliminarEnhorabuena por tú blog. Si te apetece visitar el mío, estoy en "zancadas ligeras".
Saludos,
carmar